Todas las palabras que me dijiste las tomé como oro: oro vaporoso y sonoro, una manera de explicar que se puede vivir y se puede decir y se puede querer. Las tomé como oro: con miedo, y admiración. Oro: iluminación.
Si tuviese levadura haría pan, pensé. Pero no tengo.
Oro.
Un momento que supe exactamente cómo disfrutar.
sábado, noviembre 14, 2009
Previous Posts
- nada de diamantesnada de trufasnada de tu nombreju...
- repetición, estupidez, redundanciaaburrimiento, ex...
- partimos del precepto que de una tarde linda no sa...
- ¿cómo hacés para ser tan linda? tengo la teoría qu...
- recorrido
- No vendría mal, una fumigación. Para sacar las hor...
- Estamos caminando juntos sin hablar. Yo miro a la ...
- Ayer llamaste a la mañana y estaba preparando el d...
- Dejo a maserar mis problemas en el baúl de tu coch...
- aprendimos nuevas palabraspara describir lo que se...
3 Comments:
esto me gusta mucho!
a mí también
ahoraque lo pienso este texto me hace acordar a un tema de virus: "oro, oro, oro en polvo, yo te adoro...temo enloquecer con este bajón".
Además, no me anda emesene. Todo mal.
Publicar un comentario
<< Home